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Sensor de protección de puertas ShieldScan
Un casco de bicicleta que no sea ni moderno ni proteja, un airbag de "más me vale que no tenga un accidente" y un salvavidas que de salvavidas lo único que tiene es su forma circular son ejemplos perfectos de que nada debería ofrecer solo un poco de protección. Lo mismo sucede con la protección de las puertas automáticas. El sensor de protección de puertas ShieldScan garantiza una seguridad completa para las puertas batientes conforme a la normativa EN16005. Más información sobre la nueva generación de sensores que combina una tecnología innovadora, una fácil puesta en marcha y un diseño minimalista sin correr riesgos.
El nuevo sensor ShieldScan para la protección de puertas utiliza la tecnología de tiempo de vuelo, que calcula la distancia en función del tiempo de desplazamiento de un haz de luz y permite realizar mediciones seguras y milimétricas con una alta precisión de repetición y tiempos de respuesta cortos. Mediante una geometría de haces optimizada, el sensor se adapta a los diferentes requisitos de las tres zonas de las puertas. De este modo, ShieldScan monitoriza el borde de cierre principal, la hoja de la puerta y el borde de cierre secundario gracias a sus haces individuales especialmente alineados, por lo que detecta eficazmente si una persona o un objeto interrumpe los haces de protección. La trayectoria del haz se adapta a las condiciones de la puerta que haya que proteger en función de su altura y anchura.
Esta área de escaneo protege la zona del borde de cierre principal. Debido a la trayectoria del haz, el sensor siempre detecta por encima del pasamanos y no alcanza la manilla de la puerta.
Este haz rodea el borde de cierre secundario. Gracias al campo de haz curvo en el lado de las bisagras, el sensor ShieldScan detecta el agarre lateral. Esto garantiza una protección optimizada entre el marco de la puerta y las bisagras, por lo que los usuarios gozarán de la mejor protección del mercado ante cualquier accidente, como pillarse los dedos.
Esta trayectoria del haz asegura la hoja de la puerta automática. La puerta se detiene si una persona o un objeto interrumpe el campo de protección.
El sensor ShieldScan consta de una carcasa básica y una cubierta, se puede montar en pocos pasos y con un máximo de tres tornillos en el borde de cierre secundario. Basta con un sensor por cada lado de la puerta para proteger toda la hoja de la puerta. Durante la puesta en marcha, el sistema de sensores memoriza, en primer lugar, la distancia al suelo. Mediante un intuitivo control de gestos, se define, primero, la distancia al borde de cierre principal (anchura de la puerta) y, durante el siguiente recorrido de la puerta, el ángulo de apertura máximo de esta.
El sensor tiene un ajuste de su campo de protección dinámico y dependiente del ángulo, por lo que no es necesario configurarlo si hay una pared detrás de la puerta abierta. Cuando la puerta se abre, los haces individuales del campo de protección se apagan, uno tras otro, hasta que se alcanza el ángulo máximo de apertura. Por lo tanto, cualquier cambio detrás de la puerta abierta se ignora. Esto permite un funcionamiento exento de problemas, incluso si se modifica el entorno añadiendo unas plantas, por ejemplo.
El sensor de protección de puertas ShieldScan permite una instalación y puesta en marcha rápida y sencilla. Todos los componentes necesarios se incluyen en el contenido del envío. Este vídeo explicativo muestra en detalle cómo realizar la instalación y puesta en marcha.
El sensor de protección de puertas ShieldScan cuenta con una carcasa de plástico estrecha y cúbica para una instalación discreta, por ejemplo, en puertas de vidrio con marcos especialmente estrechos.
Gracias al diseño optimizado de la carcasa, el sensor encaja perfectamente en cualquier tipo de puerta.
¿Tiene alguna pregunta sobre el sensor de protección de puertas ShieldScan? Estaremos encantados de ayudarle. Solo tiene que enviarnos un mensaje o solicitar una consulta personal con uno de nuestros expertos.